- Recalcó que el tema de agua limpia y saneamiento no es nuevo para la agenda política mexicana, tanto que desde el año 2012, el agua en México se constituye como un derecho humano
El garantizar el acceso al agua limpia y al saneamiento, así como al tratamiento y potabilización, es una cuestión de derechos, por lo que las autoridades deben generar el cumplimiento a plenitud de éstos, recalcó el diputado Víctor Manríquez González, integrante de la Comisión de Derechos Humanos de la LXXV Legislatura del Congreso del Estado.
El también coordinador del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática, recalcó que el tema de agua limpia y saneamiento no es un nuevo para la agenda política mexicana, tanto que desde el año 2012, el agua en México se constituye como un derecho humano.
“El artículo cuarto constitucional establece que toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible, por lo que el Estado debe garantizar este derecho y la ley definir las bases, apoyos y modalidades para el acceso y uso equitativo y sustentable de los recursos hídricos”.
Víctor Manríquez puntualizó que los estudios de la medición multidimensional de la pobreza del CONEVAL, señalan que el 19.8 por ciento de la población, es decir, 24.7 millones de personas carecen de acceso a los servicios básicos en la vivienda, entre cuyos componentes se incluye la disponibilidad de agua.
“Esto quiere decir que casi el 20 por ciento de la población no tienen garantizado el suministro de agua en México, lo que significa una violación permanente a sus derechos fundamentales”.
Recalcó que el acceso al agua limpia y saneamiento es uno de los temas más relevantes para la agenda en temas ambientales y sociales, ya que el recurso es limitado y cada año existen retos climáticos que hacen que escasee, razón por la cual el trabajo en este es imperante.
“Para garantizar un desarrollo sostenible, es imperante que la población que no tiene acceso a este recurso sea la que se deba atender de manera prioritaria y de una manera innovadora para poder cerrar la brecha de desigualdad, ya que es imposible tener un crecimiento económico si no se garantiza que cada mexicana y mexicano cuenten con este preciado y necesario recursos sin límites”