- Beneficiará a la población de seis municipios y una localidad
A finales del mes de diciembre entrará en funciones el Centro Intermunicipal de Tratamiento Integral de Residuos Sólidos (CITIRS) de Uruapan, impulsado por las secretarías de Medio Ambiente (Secma) y de Comunicaciones y Obras Publicas de Michoacán (SCOP). Este sitio será el fin último de aquellos materiales que no se pueden reciclar provenientes de seis municipios y una localidad.
El titular de la Secretaría de Medio Ambiente, Alejandro Méndez López, destacó que desde el Gobierno de Michoacán se promueve la campaña Si la separas ya no es basura, con el objetivo de recuperar la mayor cantidad posible de materia prima para que pueda ser reciclada y de esta forma ahorrar en la extracción de recursos naturales aplicando un sistema de economía circular.
“Si se dejan de mezclar componentes naturales o sanitarios con materiales que pueden ser recuperados, estaremos dando mayor vida útil a esta celda de confinamiento, donde lo ideal es que sólo sea depósito para materiales que no puedan ser valorizados, todo lo demás puede ser aprovechado si la sociedad en general participa”, manifestó.
Esta obra ofrecerá servicio a Uruapan, Paracho, Tancítaro, Taretan, Tingambato, Nuevo Parangaricutiro, y a la comunidad indígena de Arantepacua, municipio de Nahuatzen. La obra implicó una inversión de 24.6 millones de pesos del Fondo de Aportaciones Estatales para la Infraestructura de los Servicios Públicos Municipales (Faeispum).
Para revisar los avances de este CITIRS, personal de las secretarías de Medio Ambiente y Obras Públicas realizaron una visita de inspección para conocer las características que se proyectan en la obra, misma que se espera ese encuentre lista para operar a finales de este 2023.
Se busca que a este sitio se destine la menor cantidad posible de residuos, para ello es necesario la colaboración de la ciudadanía, a quien se les pide de manera continua que no revuelva los materiales que pueden ser reciclados para que permitan su revalorización, con esta medida también facilitan que los componentes orgánicos se destinen a sistemas de transformación para la producción de bioinsumos que ayudarán a abastecer la demanda de fertilizantes naturales en la región.