Por Javier Lozano Solis
Todas las fuerzas políticas, como sabemos, tienen que poner en práctica algún mecanismo de elección para miles de puestos que se jugarán. Eso significa que, cada una de ellas, tendrá que determinar la vía o el camino para tomar decisiones. De hecho, un instrumento democrático, no hay duda de ello, fortalecerá la unidad y evitará pugnas que, como se sabe, dificultan la participación. Por esa razón, la dirección de cada partido tiene que abrir el abanico a la pluralidad.
Ese caso, por ejemplo, ha permeado en el municipio de Apatzingán. Como sabemos, El Frente Amplio por México, a lo largo y ancho del país, tiene que presentar una lista de candidatos a miles de puestos de elección popular. Uno de ellos, claro está, el que mencionamos en este fragmento. Inclusive, reina un clima de incertidumbre por saber qué pasará en los próximos días. De alguna forma, tiene que salir un cuadro para competir; sin embargo, la preocupación es que sea de forma unilateral. Si ese fuese el caso, eso significaría, de cierta manera, una afrenta para los simpatizantes, la desigualdad y la falta de piso parejo.
Hablamos del proceso interno para definir al candidato del Frente para la presidencia municipal de Apatzingán. La apuesta, de hecho, es encontrar un perfil competitivo que pueda competir de tú a tú con Morena. En ese sentido, liderazgos y activos políticos de aquella región han pugnado para que las reglas de participación sean claras y democráticas. Por esa razón, el CEN del PAN está obligado a transparentar el mecanismo para tomar decisiones.
Siendo uno de los municipios más importantes del estado, Apatzingán está en un punto estratégico. A raíz de ello, se debe evitar cualquier tipo de injerencia, pues ha trascendido, desde los círculos de opinión, que a través de la dirigencia estatal del PAN buscan imponer— en común acuerdo con el PRD— un perfil que no goza de simpatía entre la población civil. Quien puede estar metida en ese asunto— se rumora— es Cuquita Cabrera. Se habla, incluso, de un acuerdo para meter una propuesta de las filas del Sol Azteca. De hecho, un grupo de referentes de mucho peso en Acción Nacional ha fijado una postura clara para que no exista ningún tipo de componenda.
Y como la alianza enfrentará a la coalición de Morena, el Frente debe tomar en cuenta alguien que genere conexión con la gente. Hablo del poder de convocatoria y, por supuesto, del protagonismo para encarar este tipo de ejercicios electorales. Inclusive, el PAN, en los últimos años en la región de tierra caliente, se ha hecho sentir con mucha fuerza. En efecto, Acción Nacional ha estado a punto de ganar el ayuntamiento de Apatzingán. En pocas palabras, es una fuerza política que se ha consagrado. Eso, en efecto, es un componente que juega a su favor y un elemento clave para levantar la mano y, de paso, encabezar los trabajos de proselitismo en la región, pues, en los hechos, tiene lógica y sentido.
Podemos mencionar muchos activos políticos que tienen capacidad para encarar un proceso electoral como el que se avecina. Inclusive, quien tiene mayores posibilidades, de acuerdo con la perspectiva social, es el regidor del PAN, Marcos Méndez. Me atrevo a decir que, para este ejercicio interno, él es la apuesta del PAN municipal. Y no solamente de las estructuras de la región, sino de la población en general. Tiene presencia y trabajo de base. Además de ello, se ha consolidado como un cuadro joven. Para el caso, podemos decir que ha construido las condiciones para jugar y figurar en las boletas del próximo 2 de junio.
Él, por su parte, parece estar listo para encabezar los trabajos de la alianza si la militancia toma partida por él. Todo indica que sí, sobre todo porque ha hecho sentir presencia en Apatzingán. Por esa sencilla razón, es necesario que se privilegie la democracia. Esa es una razón suficiente para que, lo más pronto posible, la dirigencia estatal tome nota de la transparencia y la pluralidad que piden referentes como Eduardo García Chavira, Álvaro Espinoza, Elías Vega, Martín Gómez y Rigoberto Peláez. Ellos, de hecho, pugnan para que el PAN, con esa fuerza que ha ido capitalizando, sea el abanderado del Frente Amplio en Apatzingán.