El cobarde asesinato de Hipólito Mora y de tres de sus escoltas, evidencia una vez más la errónea y ridícula estrategia de seguridad de “abrazos y no balazos” que abandera el Gobierno Federal, y que de forma absurda replica el Gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla.
Cuquita Cabrera Hermosillo, Presidenta del Comité Directivo Estatal (CDE) del Partido Acción Nacional (PAN), afirmó lo anterior y condenó que el crimen organizado opere con total impunidad, en todas las regiones de Michoacán.
“En los últimos días se ha focalizado la violencia en la región de Tierra Caliente, pero en ésta y en todas las regiones de Michoacán la delincuencia opera de forma impune, gracias a la ridícula estrategia de ‘abrazos y no balazos’ del inquilino de Palacio Nacional”, señaló.
Cabrera Hermosillo exige al gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, dejar de politizar el tema de la seguridad y mejor crear una estrategia que permita generar condiciones para el pleno desarrollo de las y los michoacanos.
“Es urgente que Alfredo Ramírez atienda el reclamo de todas las regiones de Michoacán y garantice la seguridad. La estrategia de seguridad federal fracasó y es evidente que el poder está del lado de los criminales”, sostuvo.
Por su parte, Javier Estrada Cárdenas, Secretario General del CDE del PAN, advirtió que el ataque contra Hipólito Mora es la crónica de una muerte anunciada, ante el grave abandono que mantienen las instituciones de los Gobiernos Federal y Estatal en todo Michoacán.
“Los gobiernos de López Obrador y Alfredo Ramírez sabían que era cuestión de tiempo para que los criminales, nuevamente, evidenciaran la falsa estrategia de seguridad. Hoy vemos que La Federación y el Estado no tienen capacidad para garantizar el estado de derecho en la entidad”, precisó.
