POR JUAN PEREZ MEDINA.
Durante muchos años hemos buscado el bienestar de los trabajadores y las trabajadoras de este estado. Lo hicimos desde el movimiento social y sindical luchando por democracia, mejores salarios y prestaciones y mejores condiciones de trabajo. Pero también desde el ámbito de la política, como mecanismo para echar abajo a los malos gobernantes. Lo hemos hecho desde la lucha insurreccional y la lucha electoral.
Por esta última vía hemos participado en algunos partidos políticos con tendencia de izquierda, considerando que los triunfos electorales en el parlamento, en las municipalidades, gubernaturas y el país, cambiarían las condiciones de vida de las personas. Poco de ello hemos podido alcanzar y, más bien, hemos perdido a muchos de nuestros representantes en los puestos como funcionarios o representantes populares, que han engrosado la clase política. La izquierda electoral ha hecho, generalmente, el repetir de mala manera lo que ha hecho la derecha y, cuando bien nos ha ido, han amainado nuestros males, sin proponerse desterrarlos del todo.
En el seno del poder, nos encontramos con una clase política muy arraigada que sólo se recicla de generación en generación creando fuertes legiones familiares que se imponen a los intereses del pueblo. De este tipo de personajes está conformada la actual clase política con los mismos personajes que van de un cargo a otro de manera permanente, enriqueciéndose a costa del pueblo, por medio de la corrupción y la impunidad cómplice.
Nosotros pretendemos erradicar a esa clase política rancia, que nada hace a favor del pueblo, y que se regodea en todos los partidos del sistema electoral actual. Es hora ya de echarlos del poder político y renovar los cargos públicos con nuevos ciudadanos y, al mismo tiempo, crear las leyes que impidan su perpetuidad. Estamos con el sufragio efectivo y la no reelección.
Creemos que la política es el medio por el cual la sociedad se organiza y actúa para mejorar la vida de los habitantes de una comunidad, municipio, entidad o país y a eso le apostamos y pretendemos dedicarnos: a trabajar en pos de la organización ciudadana para lograr su participación y la solución de los enormes problemas que nos aquejan con honestidad, responsabilidad, compromiso y justicia.
Nosotros confiamos en el pueblo y su derecho a darse el gobierno que le plazca, considerando que lo hará siempre buscando mejorar sus condiciones de vida económica, social, cultural y política. Y no actuamos nunca con dobleces a la hora de decir y hacer. Es decir, no compartimos la idea de abanderar la lucha del pueblo por la democracia y su bienestar, al tiempo que hacemos lo contrario.
Para cambiar este terrible estado de cosas, es imprescindible contar con una herramienta política capaz de actuar con congruencia y de cara al pueblo. Nada de acuerdos por encima de la gente y en la oscuridad. Nada de imponer, sino dialogar, consensuar, convencer, acordar y siempre junto con la gente. Un partido que dice una cosa y hace otra, como he dicho, no nos sirve.
Por eso, un grupo de personas libres y de izquierda hemos decidido formar un nuevo partido de carácter estatal cuyo objetivo es servirle al pueblo michoacano para lograr el bienestar de sus habitantes desde la construcción de una vida honesta, austera, decorosa y justa.
Un partido que apuesta a dignificar la función pública. A poner por encima de cualquier interés el del pueblo. Pretendemos organizar a la ciudadanía para que de manera colectiva dialogue, discuta y acuerde el quehacer a favor de todos para vivir mejor. No buscamos el poder por el poder, sino construir el poder desde el pueblo que se organiza y que desde la colectividad acuerda lo mejor para todos. Queremos un poder participativo, creativo y consecuente, emanado del pueblo a través de la construcción de su vanguardia constituida por sus mejores técnicos, profesionales, científicos, creadores, artistas y políticos, encaminados a erradicar la violencia, el vicio, la corrupción y la impunidad y con el objetivo máximo de alcanzar la felicidad de todos.
Te invitamos a sumarte a este proyecto político emancipador que trata de hacer ciertos los postulados de los independentistas, los hombres de la reforma y la revolución y de aquellos que vienen tratando de hacer verdadera la cuarta transformación de México en Michoacán y que busca integrarse por gente simple, trabajadores y trabajadoras, estudiantes, desempleados, profesionistas, mujeres y hombres dignos y que pretenden ser verdaderamente libres, tanto del campo Como de la ciudad.