La presidenta del Comité Ejecutivo Estatal de Morena Michoacán, Ana Lilia Guillén Quiroz, confió que el gobernador de la entidad, Alfredo Ramírez Bedolla, no haya ordenado emprender una persecución política contra quienes desde el instituto político que lo llevo al Solio de Ocampo, se oponen a sus designios de conformar un partido de estado.
Advirtió que un consejero estatal a fin al nuevo comité, fue detenido y encarcelado junto a otras tres personas, sin una razón aparente, toda vez que quien conducía la unidad y su copiloto eran conductores designados, luego de que todos acudieron a una reunión de amigos.
El jueves, un día después de ese hecho, también se despidió de una dependencia gubernamental a un familiar de otro consejero que ha manifestado su apoyo a esta presidencia, afirmó.
Recordó que una semana antes, tres elementos de la Policía Ministerial fuertemente armados acosaron frente a su domicilio a otro miembro del Comité Ejecutivo Estatal, a quien le pidieron licencia, tarjeta de circulación de su auto y al final le advirtieron amenazantes: “esto es un apercibimiento”, para luego marcharse.
Guillén Quiroz, tras responder a cuestionamientos de los diversos medios de comunicación, a quienes agradeció el apoyo, dijo que ambos hechos despiertan suspicacias por la casualidad implícita. “No queremos pensar” que hay una persecución política, “sería volver a lo que vivimos hace 35 años que se daban ese tipo de cosas de manera cotidiana”, pero con otros regímenes.
La dirigente estatal de Morena, hizo nuevamente un llamado respetuoso al mandatario para que se frene el acoso, por que percibimos que “más que un compromiso con la seguridad”, se busca amedrentar a gente muy cercana al consejo que le llevó a la presidencia del CEE morenista.
Hoy, dijo, Alfredo (Ramírez) “no lo percibe, pero hay gente muy cercana que está interesada en dañarlo…”.
Y agregó la dirigente del partido giunda: “va a necesitar de sus amigos; y tiene que cuidar esa parte… Yo quisiera que él entendiera que las disidencias no marcan enemistades, no marcan contrapuntos; simplemente son disensos que pueden caminar en paralelo, sin chocar, pero con respeto”.