Escribe: Javier Lozano
El presidente municipal de Morelia encontró un punto de equilibrio en su desempeño. De hecho, las propias instituciones que evalúan el ejercicio han calificado su labor como positiva; ha sido una tarea titánica porque tuvo que echar mano de un esfuerzo mayúsculo ya que había áreas de oportunidad en completo abandono.
Con ese ánimo, Alfonso Martínez demostró eficiencia y madurez a la hora de tomar decisiones. Eligió atinadamente a hombres y mujeres con el afán de impulsar una auténtica política ciudadana.
A raíz de eso, varias dependencias se han convertido, en este momento, en un sostén importante. Eso, indudablemente, ha sostenido el gran trabajo de Alfonso Martínez a pesar de las limitaciones en muchas secciones que, antes de tomar en sus manos la administración, tenían una condición precaria por desatención.
Fue una gran determinación canalizar en posiciones claves en distintos espacios para resolver los retos, pero también prosperar con mecanismos y estrategias que han puesto a la vanguardia al municipio de Morelia.
Y eso, por supuesto, es en gran medida la capacidad de quienes se han tomado muy en serio su labor. Así pues, esa premisa nos hace considerar los alcances, pero también las virtudes que se notan por los esfuerzos.
Aquí es importante tomar en cuenta el papel preponderante de la mujer; esa labor se debe, en gran medida, a las posiciones claves.
Tomo el ejemplo de dos mujeres además de optimistas, comprometidas con la labor administrativa. Hablo de Verónica Zamudio, titular del Instituto de Cultura Física y Deporte en el municipio de Morelia. Asimismo, María del Carmen López Herrejón, designada por el cabildo a fin de encabezar la contraloría en la capital del Estado.
Por esa razón hemos ponderado el buen desempeño de ésta administración. Alfonso Martínez consideró la labor de dos mujeres que influyen en sus posiciones y que, además, aportan con más participación para que el ayuntamiento goce de una calificación positiva. El presidente municipal tiene, hoy por hoy, una evaluación que muestra sus buenas decisiones en organizaciones, así como en planeación y ejecución de estrategias.
Justamente esa ha sido la clave: el trabajo colaborativo de hombres, pero de igual forma de mujeres altamente capacitadas para tomar decisiones y resolver situaciones de cualquier naturaleza administrativa.